Los Locos de La Vela: una locura que nos enorgullece

Quienes me conocen saben que pocas cosas me emocionan tanto como descubrir tradiciones que siguen vivas…
que laten con fuerza en el corazón de un pueblo.
Y una de las más increíbles que he presenciado en Venezuela es, sin duda, la de Los Locos de La Vela, en el estado Falcón.
Cada 28 de diciembre, La Vela de Coro se transforma.
Se llena de color, de risas, de música, de disfraces y, sobre todo, de identidad.
Aunque esta fiesta se celebra en otras partes del país, es aquí, en este rincón del occidente venezolano,
donde Los Locos han alcanzado su mayor esplendor.
No exagero al decir que esta es la tradición número uno del acervo cultural veleño.
Y con justa razón.
Tuve la oportunidad de vivir esta experiencia de cerca.
Y es algo que te envuelve desde el primer momento.
Todo comienza la noche del 27 de diciembre, cuando una figura muy particular recorre las calles montada torpemente sobre una burra:
🔸 La Mojiganga, vestida con levita negra y sombrero chistera,
🔸 Va dejando en casas seleccionadas las invitaciones oficiales
🔸 Es el anuncio de que al día siguiente, Los Locos pasarán por allí
🔸 Es como un susurro de locura que comienza a despertarse
Al amanecer del 28, el sonido de un cohete marca el inicio.
El pueblo entero sabe lo que viene.
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El primer personaje en aparecer es El Correo:
Un hombre andrajoso que toca de puerta en puerta en las casas visitadas por La Mojiganga. -
Al segundo cohete, los comerciantes cierran sus puertas, como dicta la tradición.
Los más pequeños se esconden con esa mezcla de miedo y emoción. -
Y al tercer cohete…
¡Los Locos están en la calle!
Desfilan con sus:
• Trajes llenos de colorines
• Máscaras pintadas a mano
• El famoso cucurucho hecho de raíces de cují
Antes, el juego consistía en llevarse lo que pudieran de las casas o negocios.
Hoy, aunque eso ha cambiado, el espíritu sigue intacto:
Ya no se llevan cosas, se llevan aplausos, sonrisas y la admiración de todos los presentes.
Las fantasías que usan ahora son verdaderas obras de arte:
• Animales
• Personajes históricos
• Criaturas imaginarias
• Héroes populares
• Creaciones únicas hechas a mano
Familias enteras se preparan todo el año para este momento.
Se cocina, se sirve bebida, se baila al ritmo del cuatro y los tambores,
y la alegría se desborda por cada calle.
Todo esto está organizado por la Junta de Los Santos Inocentes,
que desde hace más de 50 años mantiene viva esta tradición.
🎭 Al final del día,
• Se premian los mejores trajes
• Y la fiesta se prolonga hasta la madrugada del 29
• No hay descanso… solo celebración
Visitar La Vela durante esta fecha es entender de qué está hecho el pueblo venezolano:
de creatividad, de resistencia, de alegría sin medida y de un profundo respeto por nuestras raíces.
Yo me siento profundamente agradecido de haber vivido esta experiencia.
Y si tienes la oportunidad, no te la pierdas.
Porque Los Locos de La Vela no solo son una fiesta:
son un patrimonio vivo que debemos preservar, aplaudir,
y —por qué no— celebrar como si fuéramos uno de ellos.
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